Si hay algo que me fascina de Asia, es su veneración por los dragones, nobles animales de ficción, protagonistas de numerosas leyendas, fábulas y mitos. En la mitología China, su cuerpo se compone de partes de otros animales: ojos de langosta, cuernos de ciervo, morro de camello, nariz de perro, bigotes de bagre, melena de león, cola de serpiente, escamas de pez y garras de águila. Se cree que el Rey Dragón domina la meteorología, siendo un propiciador del agua y la lluvia, aunque por lo visto, no siempre este animal de fábula, ha estado de su parte.

Porque según cuentan las leyendas locales de Vietnam, cuando sus moradores luchaban contra los invasores chinos provenientes del mar, el emperador de Jade envió una familia de dragones celestiales para ayudarles a defender su tierra.

Estos dragones escupían joyas y jade. Las joyas se convirtieron en las islas e islotes de la bahía, uniéndose para formar una gran muralla frente a los invasores, y de ese modo lograron hundir los navíos enemigos. Tras proteger su tierra formaron el país conocido como Vietnam. Ha Long significa «dragón descendente», un nombre que procede de una leyenda local, aunque,  según otras versiones, la bahía fue creada cuando el dragón se lanzó al mar; al caer agitó la cola y ésta golpeó la tierra ocasionando profundos valles y grietas que fueron inundados por el mar.

Esta curiosa leyenda, merece ser vivida como un sueño, a cuerpo de Rey Dragon, y para relatar cómo acabamos eligiendo al Peony cruises entre tanta oferta, lo haré desde el principio, cuando tras mucho leer, y leer, quisimos conocer estas misteriosas aguas de una manera mas íntima, a modo de pequeño homenaje a tan maravillosa historia.

Y así, descubrimos la tranquila bahía de Lan Ha, tan bonita como su vecina Halong, pero sin su insoportable masificación, que es el precio que ha tenido que pagar por su merecida fama. Al ver las primeras imágenes de Lan Ha, quedamos prendados de su encanto, y empezamos a buscar un barco cuya ruta incluyese Lan Ha.

Con este criterio, seleccionamos tres barcos con recorrido por Lan Ha, con precios ajustados a nuestro presupuesto y contactamos con varias agencias para conocer el precio final. En orden de preferencias, el primero de la lista, el Orchid Cruises, ya estaba completo para nuestras fechas. Y el Azalea Cruises, el tercero en liza, se salía del presupuesto, y esto propició que hubiese un claro vencedor, el Peony Cruises.

Posteriormente, nos dimos cuenta de que los tres buques finalistas, pertenecían al mismo grupo empresarial, el Pelican Group, lo que nos convenció de que, cualquiera que hubiesemos escogido, hubieramos quedabamos en buenas manos.

El Peony Cruises, nuestro sueño hecho realidad, es nuevo barco de finales de 2018, con categoría cuatro estrellas con unas críticas inmejorables tanto en Tripadvisor, como en Booking.

Peony Cruises.Camarote doble superior.

La naviera propietaria, emplea nombres de sugerentes flores para bautizar sus embacaciones, como Azalea, y Orquídea, en esta ocasión escogió la Peonia roja, que simboliza el honor y la riqueza en la milenaria cultura china.

La Peonia se encontraba en los suntuosos palacios o las casas de la antigua nobleza, como símbolo de elegancia y distinción, por estar considerada la reina de las flores. También encontramos múltiples referencias de la admiración que se sentía hacia esta icónica flor a lo largo de la historia, en las bellas artes, la música, pintura y como no, la literatura.

Y con este distintivo por bandera, la pretensión de la dirección del buque al contruir esta maravilla flotante fue la de proporcionar a cada huésped su propio palacio flotante en el que se sienta tratado como un verdadero rey y disfrute de un confort inigualable, para el mas reparador de los sueños navegado por ese destino tan soñado. 

Diseñado por creativos franceses, famosos por su arquitectura imperial, el Peony es un majestuoso barco, en el que se ha cuidado hasta el mínimo detalle en todos sus espacios comunes. Así,  la recepción, el restaurante, la zona de spa, y la zona de bar siguen los estándares minimalistas, sin perder un ápice de glamour y lujo imperial.

Este es un breve extracto de la carta de presentación del Peony Cruises en su web.  Las fotografías y los buenos comentarios de los que han sido sus pasajeros, vertidos en Tripadvisor hicieron el resto y precipitaron una elección que desde el primer momento en que nos cruzamos con el Peony, creo que teníamos bastante clara.

Peony Cruises. Detalle del Camarote.

Sus camarotes, con su esmerada decoración, y su completo equipamiento, que incluye mini bar, caja de seguridad, hilo musical, agua embotellada, zapatillas, cesta de frutas en la habitación, televisión por satélite y vestidor, estan pensados para proporcionar a los huéspedes una experiencia única en el más fastuoso de los paisajes.

Sobre el papel, o mejor dicho, sobre lo digital, y entiendase por digital, las cientos de opiniones de Booking, Tripadvisor, y Agoda, el Peony Cruises es caballo ganador. Y aunque no solemos apostar, la impresión que tenemos, a priori, es de que no nos va a defraudar.

Y volviendo a la realidad, días antes de emprender este tan trabajado viaje, esta reseña no estaría completa sin relatar lo que nos ha terminado de enamorar del camarote, aunque pueda parecer algo vano, fátuo y sin importancia, han sido sus enormes ventanas panorámicas, que cubren completamente todo el lateral, mostrando las esmeraldas aguas de la bahía.

Peony Cruises. Balcon privado en cada camarote.

Como buena española he de agradecer infinitamente al arquitecto que tuvo el gran detalle de añadir un balcón privado desde el que disfrutar del maravilloso paisaje de la bahía, detalle, que, como pudimos comprobar en el crucero de Egipto, hace perfecta la experiencia de navegación, al poder contemplar con mayor intimidad los paisajes a medida que el barco avanza, y que permiten inmortalizarlos a golpe de cámara cómodamente sentados en nuestra particular terraza, al tiempo que, porque no, se degusta una cerveza fresquisima del minibar, que para eso esta, con unas tapas del país, quizás, unos rollitos vietnamitas, cortados a tacos, o algun exótico snack a base pan de gambas. Porque un plato de iberico 5 jotas, es demasiado pedir, y ya sería juntar una de las siete maravillas naturales, con la maravilla gastronómica por excelencia.

Me ha encantado, me ha dejado conla boca abierta, y me ha llmado especialmente la atención, la superbañera independiente y  minimalista, rodeada de blancos guijarros, a modo de champañera, situada frente a una de las ventanas panorámicas, que nos van a permitir disfrutar de un espumoso baño relajante, sin perder detalle del entorno. Una Botella de Moet Chandon, a pequeños sorbos, frente a la bahía, una de las siete maravillas  ¡Esto es glamour! y que me quiten lo bailao ... ¿El paraiso? Si no lo es .. es lo mas parecido.

Peony Cruises. Bañera independiente.

Los afortunados viajeros que ya han disfrutado de la experiencia de navegar en este lujoso buque, no dudan de calificar como excepcional el barco y sus instalaciones, al igual que la gastronomía que se disfruta a bordo, se lleva numerosas alabanzas, al incluir cenas gourmet de auténtica cocina vietnamita a la luz de las velas.

Esto era lo que buscabamos, sin duda.  Y tengo que confesar que me ha hecho soñar despierta. Y eso que todavía, mi alma viajera no se había manifestado. Era el momento de descargar el itinerario, verificar la ruta, y comprobar qué actividades estaban incluidas en el programa. Sabíamos que la mayoría de barcos incluían paseos en kayak, y si algo echamos de menos de Malasia, fue la divertida excursión por los riachuelos de Langkawi y sus manglares. Momentos inolvidables que, como mínmo, pensamos igualar.

 Peony Cruises. Actividades a bordo. Kayak

Por lo visto, esta vez, tendremos la oportunidad de practicar en la bahía de Lan Ha, en la zona de Ao Ech, y también de nadar en cálidas aguas de color esmeralda, sesiones de pesca nocturna de calamares y recibir clases de cocina vietnamita, impartidas por el propio chef del barco, todo un desafío para el cocinero que en mi interior habita.

Estas clases, darán sus frutos más adelante, y habrá pruebas fotográficas que demuestren que he sido la perfecta alumna. Hablo en futuro, porque en estos momentos, estoy sentada frente a un infernal ordenador, aporreando teclas que compongan un texto acertado, y positivo, porque exactamente, y en estos momentos ya faltan pocos días para despegar y la euforia se apodera de mí.

Siendo sincera, la pesca de calamares, a altas horas de la noche, tiene su punto de morbo. Tiraremos la caña, que nunca se sabe lo que puede caer. Siempre nos queda el consuelo de tomarnos la revancha en las clases de cocina y enseñar a nuestro chef como se prepara el pulpo a la gallega .. ¿o era calamar?

Clases de cocina en Peony Cruises

Tengo que dejar de soñar, y continuar narrando lo que le vimos a este crucero, que no vimos en otros. Algo que nos gustó fue la distancia que separa Hanoi del puerto de embarque del Peony Cruises, a unas dos horas, en lugar de las cuatro habituales, así, la recogida la tenemos entre las 9:00 y las 9:30, sin madrugar, detalle que agradeceríamos también a la vuelta, porque a las 14:300, estaremos de nuevo en Hanoi, con toda una tarde por delante. Como extra, en septiembre, el traslado en ambos sentidos hasta el puerto estaba incluido, a bordo de una lujosa minivan (porque sin Champagne, no es limousine, y se queda en minivan).

Pero empecemos por el principio de nuevo, y ya van dos. Y hablemos de lo importante. ¿Que ocurrirá tras la recogida en el hotel, por la minivan, sin champagne, después de unas dos horas de carretera?

Pues .. que una vez en el muelle de Got, comenzará la aventura por Lan Ha y Halong, alcanzando lugares poco masificados y espectaculares a los que se llegará vía la isla de Cat Ba, disfrutando del hermoso paisaje de canales, islotes e islas: Thoi Quyt, Coc Ngoi, Da Chong, o Gian Lua, perteneciente al parque nacional de Cat Ba. El barco permanecerá en Tra Bau, en el área menos masificada de Lan Ha, que alberga numerosas playas que todavía no han sido destruidas por la vorágine constructora que todavía sin masificar.

El programa incluye dos visitas, una a la aldea Viet Hai, situada en el parque nacional de Cat Ba en bicicleta, o en coche eléctrico (con coste adicional), si "no sentimos las piernas" o queremos llegar sin despeinarnos y sin sudar, preparadas para ese Selfie que arrase en instagram, con el gorro cónico sobre la cabeza, y la mirada perdida hacia la bahia.

En esta pequeña villa, y según los comentarios encontrados en la red, nos espera algo muy exótico, una demostración y degustación de vino de arroz con sabor a serpiente, escorpión, abejas melíferas o fruta. ¿Es en serio? ¿Alguien se ha comido un escorpion, vivo o muerto, para conocer su sabor? Bueno, supongo alguien lo ha probado, confundiendolo con una de pinchos.

La segunda excursion, magnifica, a la milenaria cueva de Trung Trang en el parque natural de Cat Ba, a la que se llega en autobús. Esta larguísima cueva rodeada de un paisaje exuberante e inalterado, cuyo recorrido nos llevará, al menos, 25 minutos, sirvió como hospital y refugio para los moradores de la isla durante la guerra, y cuyos recuerdos se conservan en el pequeño museo albergado en su interior.

Peony Cruises. Excursion a la cueva de Trung Trang

Si habeis leido hasta aquí, entendereis que, tan pronto tuvimos elaborado el itinerario de viaje y decididas las fechas para el crucero, realizamos nuestra reserva. Faltan ya pocos días para que comience nuestra aventura y el recorrido por Halong y Lan Ha, es el uno de los deseos de este viaje. Esperemos que el tiempo nos respete, y a la vuelta, podamos confirmar, lo que de momento, son sueños, y los sueños, sueños son.

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Programa para 3 Días, 2 noches: Peony Cruise Itinerario

Ruta: Peony Cruise Itinerario

Detalles de la embarcación: Peony Cruise Factsheet Descripcion